A tu lado


Que difícil es mantener los ojos fijos en la cruz,
sin desviar la mirada de tus llagas.
Y acompañarte en el fracaso.
(Mete tu mano en mi costado)

Más difícil es creer que venciste la muerte,
contemplar nuestras heridas en tus cicatrices.
Y experimentar la vida desde tu resurrección.
(Que la paz sea contigo)

Pero sigues ahí.
¡No dejes que me dé por vencido!


Ignacio

No hay comentarios.: