Destierro*


El poeta necesita de la soledad.
De la soledad del pez espada...

De la soledad del buitre
(él conoce su destino).

De la soledad de la osa polar,
capaz de dar a luz en medio del hielo.

El poeta necesita de la soledad.
De la soledad de Dios.


Ignacio

* Para efectos de este domingo, donde dice “poeta” léase “profeta”, que ni es lo mismo ni es igual, pero al fin y al cabo solo los diferencia una “r” y una “f”.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Muy buen poema, Nacho
mario,si