Nietzsche se equivocó,
no se trata de voluntad de poder,
sino de necesidad de cariño.
Todo lo que hacemos es para buscar reconocimiento,
amor, aceptación.
Si Hitler mató a tantos fue por voluntad de cariño.
La vida que entregaron los héroes de la patria,
¿qué fue sino buscar admiración?
Las esculturas de Claudel, necesidad de cariño.
Van Gogh, en sus retratos, pedía a gritos ser querido.
Que Dios nos creara, ¡la más pura voluntad de cariño!
Las torpezas, las exageraciones,
los malos entendidos son necesidad de cariño.
El hombre que quiere triunfar
en el exigente mundo de los negocios.
Necesidad de cariño.
La mujer que se desvive por sus hijos.
Necesidad de cariño.
Los berrinches de púber.
Necesidad de cariño.
La mujer que quiere triunfar
en el exigente mundo de los negocios.
Necesidad de cariño.
El hombre que se desvive por sus hijos.
Necesidad de cariño.
Los berrinches de niño.
Necesidad –expresa– de cariño.
El éxtasis es la venta de cariño.
Y cuando creemos que ya nadie nos quiere,
solo resta el suicidio,
pues la vida no es otra cosa
que necesidad de cariño.
(Si escribo, lo reconozco,
es por voluntad de cariño).
Ignacio
2 comentarios:
Alkimia de otoño.
Todo lo auténtico es bello, así como en este tiempo de otoño.
Otoño, estación que invita a contemplar los recuerdos y hacer del tiempo un instante, con lo cual,deja de existir el tiempo.
Todos hablan, dicen, repiten que el tiempo más hermoso es el de la juventud...Yo no sé.... Cada instancia y estancia de la vida tiene sus colores y aromas propios. Pero en otoño... las fragancias son distintas, tiempo de metal alquímico de dorados colores amarillos,ocres, marrones. Es la belleza de la contemplación. La belleza de descubrir la propia belleza interna,sin tiempo, sin condiciones, aceptándose en el tiempo otoñal de la vida.Para dar un salto en espiral continuo y transformarse como en los comienzos, en agua de vida. Comenzando así otro ciclo, confirmando asi la vivencia de amor de eternidad.
... dejarse querer ...
... dejarse querer ...
... dejarse querer ...
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