Juan Segura no era cristiano


la lengua de fuego –señal del espíritu- humea
ya nadie habla lenguas con la imprudencia de los apóstoles.
Enrique Lihn
"La aparición de la Virgen"


El lobo botó con facilidad la casa de los primeros dos chanchitos. Sopló sobre la casa de paja y luego sobre la de palitos. Los chanchitos, asustados, partieron corriendo a la casa del hermano previsor y trabajador. Ahí estarían seguros. Ningún viento, por huracanado que fuese, podría entrar a la casa o botarla. ‘Los tres chanchitos desobedientes’ estaban a salvo y se burlaban del lobo desde el balcón.

Este domingo la Iglesia celebra Pentecostés. Luego de cincuenta días llega como un ‘balde de lenguas de fuego’ el Espíritu prometido por el resucitado. Como un viento fuerte, irrumpe en la casa donde estaban encerrados los discípulos y les trasmite toda Su pasión. Han recibido el Espíritu de Dios y nadie los callará más. Los diversos idiomas no producen confusión. Mientras en la torre de Babel reinaba el desorden, aquí los diversos idiomas son signo de la universalidad del don recibido y la invitación a que cualquiera sensibilidad se sienta incluida.

Creer en Dios y en su Espíritu, ¿nos vuelve seguros ‘chanchitos’ o arriesgados ‘apóstoles’?

Mario

No hay comentarios.: